Durante años, las pautas establecidas de trabajo eran claras. La comunicación se efectuaba por correo electrónico y la creación de contenido consistía principalmente en documentos, hojas de cálculo y presentaciones.
En los últimos 2 años, el mundo cambió y nos adaptamos a un nuevo entorno laboral en el que las personas tuvieron que complementar las herramientas tradicionales de comunicación y la colaboración presencial con soluciones alternativas, que digitalizaron rápidamente todo lo que hacemos en nuestras vidas.
Las escuelas empezaron a impartir clases solo online, los negocios se mejoraron en el comercio electrónico y las empresas contrataron a una nueva generación de graduados que conocían a sus compañeros de equipo solo a través de una pantalla.
Además, las comunicaciones pasaron a ser chats y reuniones online, y el contenido digital se extendió más allá de los tipos de documentos tradicionales a espacios más fluidos y dinámicos. Los nuevos tipos de contenido, formatos y canales exigieron herramientas más flexibles, eficaces y fluidas para que todos puedan comunicar un mensaje más impactante y colaborar a su propio ritmo.
De este modo, Microsoft 365 está cambiando con los tiempos.
Word, Excel, PowerPoint y Microsoft Outlook son mejores que antes, gracias a la integración de Microsoft Teams y la inteligencia artificial con tecnología de nube en la Web, el escritorio y los dispositivos móviles.
Pero tenemos que ir mucho más lejos. Por ello se están agregando nuevas aplicaciones para responder a las nuevas oportunidades y haciendo que Microsoft 365 sea un lienzo universal e interactivo para creadores de todo tipo.
Rafael David Martelo Visbal
Analista Junior de Innovación
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